Anhelo por Ramaḍān

Rasūluḻāẖ (El mensajero de Dios – ṣaḻāẖu ‘aleihi wa saḻam saḻam – la paz y las bendiciones de Aḻāẖ sean con él), solía hacer du‘ā en Raỵab para que se le diera la oportunidad de mantenerse con vida hasta Ramaḍān. Por haber visto ya a Aḻāẖ Ta‘ālā durante la noche de mi‘rāỵ [asención a los cielos], es inimaginable cuánto deseo él tenía de abandonar este mundo y reunirse con Aḻāẖ Ta‘ālā.

A pesar de esto, cuando se encontraba a dos meses del sagrado mes de Ramaḍān, él deseaba permanecer en este mundo para beneficiarse de las innumerables bondades y bendiciones de Ramaḍān. Esto debe ayudarnos a entender la extraordinaria naturaleza de las bendiciones de Ramaḍān, y alentarnos a anhelarlo y beneficiarnos de él.

Sheij Moulānā Muhammad Salīm Dhorat ḥafiẓaẖuḻāẖ

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